En declaraciones en la ciudad de Doha, Emirato de Qatar, el pasado 31 de marzo, Chávez invitó a Caracas a Omar Al-Bashir, Presidente de Sudán. Al-Bashir tiene una orden de detención y es prófugo de la justicia internacional por crímenes de guerra y crímines contra la humanidad. La invitación constituye una evidente renuncia por parte de Chávez a cumplir con las obligaciones que a Venezuela le impone el Estatuto de Roma, así como una interferencia a las funciones de la Corte Penal Internacional (CPI).
Por tal motivo la Plataforma Democrática de Venezolanos en Madrid conjuntamente con el grupo "Campaña Internacional para Juzgar a Chávez" solicitaron al presidente de la CPI, Magistrado Sang-Hyung Song, para que le informe de tal situación al Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a fin de que se tomen las medidas correctivas pertinentes, en conformidad con lo dispuesto en el artículo 87.7 del Estatuto de Roma, el cual hace referencia a la negativa a cooperar.
La solicitud ha sido igualmente remitida a Akua Kuenyehia, Magistrada Presidente de la Sala de Cuestiones Preliminares I, la cual dictó la orden de detención contra el presidente sudanés.
Por más de siete años, la Plataforma Democrática de Venezolanos en Madrid ha venido denunciando ante la justicia internacional las violaciones de los derechos humanos del pueblo venezolano por parte de Chávez y su régimen. La "Campaña Internacional para Juzgar a Chávez" está integrada por 54 organizaciones no gubernamentales de todo el mundo.
