La persecución a los medios de comunicación
Por ZENAIR BRITO CABALLERO
El hostigamiento contra la prensa independiente venezolana cada vez es más fuerte. Medios de comunicación gobierneros rojos rojitos son utilizados no sólo para promocionarse sino para atacar, amenazar y amedrentar.
Quien no alabe la conducta dictatorial es declarado enemigo. De ahí la supuesta conspiración de los medios de comunicación independientes sólo por no someterse al capricho oficial, por denunciar excesos, por defender La Constitución y el sistema democrático. Si bien la intolerancia a la crítica era repudiable antes, igual lo debe ser ahora. Reprochable la intolerancia oficial como el vandalismo de provocadores contra medios de comunicación.
El régimen venezolano ha conseguido silenciar prácticamente toda voz que se le oponga. Las reacciones de repudio contra los ataques a la prensa en Venezuela se han multiplicado los últimos fines de semana. Mientras la SIP denuncia que el gobierno venezolano busca hacer desaparecer a la prensa crítica — ataques permanentes a Globovisión y el cierre de 34 emisoras de las 300 radios y televisiones locales que pretende clausurar — la Organización de Estados Americanos (O.E.A.), apenas manifestó su “preocupación” por la situación de los medios de comunicación venezolanos.
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), pidió a los gobiernos democráticos de la región que denuncien la situación de la prensa en Venezuela y abandonen “un exceso de prudencia diplomática” frente a la represión desencadenada contra la libertad de expresión. Como si los subsidios petroleros a muchos gobiernos no fueran suficiente disuasivo para mantenerlos sordomudos.
Por su parte el director de Globovisión Alberto Federico Ravell alerta: “En definitiva, es una arremetida total del gobierno que se histeriza cuando sale alguna información que le molesta.” Destacó que si la prensa critica a los aliados de Chávez es tildada de “terrorista.”
El régimen de Chávez, añadió, “es autoritario que tiene sus aliados en Ecuador, Nicaragüa, Bolivia, la misma Argentina y, por supuesto, en Cuba. Ahora que perdió un aliado en Honduras, eso lo tiene molesto.”
Mientras, un grupo de periodistas protesta la presentación de un proyecto de ley sobre delitos mediáticos que prevé penas de cárcel para quien la infrinja. “Somos periodistas, no delincuentes,” clamaron los manifestantes. El cierre de emisoras y televisoras locales sumadas a la incubación de esta nueva normativa que afectaría al oficio diario del periodismo ha encendido además la luz de alerta internacional.
En Venezuela, la gran mayoría de la población, considera que “la cacería de medios” ha comenzado. “Ha empezado la cacería de brujas para que el gobierno socialista-comunista pueda mantener una hegemonía comunicacional y controlar las líneas editoriales de los medios, las opiniones de columnistas y articulistas de opinión”, explicó el gobernador del Zulia Pablo Pérez.
Los acontecimientos de los últimos días han enrarecido el ambiente y avivado la palpable polarización de la sociedad venezolana, porque Chávez quiere (hacer) desaparecer a la prensa crítica y acallar todas las voces opositoras en una muestra del carácter totalitario de su régimen.
Aclárate. Publicado: 02-OCT-2009.
Brito Caballero es doctora en Psicología y Ciencias de la Educación, y es profesora jubilada de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador.