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El hambre como acción de presión

Por PEPITO

Nuevamente mis hermanos estudiantes se ponen en huelga de hambre en un esfuerzo por traer a nuestro país una delegación de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos, así como por la libertad los prisioneros políticos y en defensa de la libertad.

La huelga de estos estudiantes es voluntaria. Aprovecho yo para hacer conciencia sobre otro tipo de huelga de hambre a la cual tienen sometidos a los venezolanos por más de medio siglo. Doy dos ejemplos:

— Hay venezolanos quienes afortunadamente aún tienen la manera como comprar víveres, pero cuando llegan al mercado se encuentran con que no hay café, ni huevos, ni leche, ni harina, ni arroz, los cortes populares de la carne ya ni se ven, por mencionar algunas cosas.

— Hay venezolanos a quienes desafortunadamente apenas les alcanza para una sola comida al día. Esto ya es verídico, tengo un compañero de clases y en su casa no hay desayuno posible, si almuerzan y si sobra, cenan con los sobrados.

A veces esto me hace recordar algo que leí unos meses atrás, que explicaba como Stalin sometió a los Ukranianos a dos años de hambre, porque el hambre le machuca la cabeza al enemigo, les hace perder la esperanza y encima, la fe en Dios. Tristemente más de dos millones de Ukranianos murieron así, de hambre.

También he leído sobre la Organización de Estados Americanos. Esas organizaciones han sido todas otros engaños y fracasos de la izquierda. Estoy seguro que tendrán un plan secundario, pero de no ser así me atrevo sugerir para su consideración, el continuar la misma huelga pero frente a embajadas como la de Estados Unidos, Francia, Italia, Colombia, Perú, eso porque así quizas puede lograr un poquito de atención a nivel internacional y crear así conciencia acerca de la calamidad que estamos viviendo.

Estoy tan orgulloso de ustedes como cualquier muchacho lo puede estar por la hazañas de su hermano mayor. Respeto mucho su valentía, en especial las muchachas. Inclusive, para solidarizarme con ustedes, yo también quiero sumarme a la huelga aquí en Barinas, sólo que mi mamá no me deja. Sí estoy ayunando (voluntariamente).

Cuando salen por la televisión, mis familiares se quedan perplejos. “Mira como está Julio Rivas de demacrado,” exclama mi mamá. “Eso da dolor,” responden mis hermanas. Para mis adentros digo, “para mí, más dolor es no poder ponerme en huelga con ellos.”

No se dejen influenciar por ningún mamarracho de los saqueadores, que es lo que más sobra en nuestro país. Adelante hermanos con las acciones de presión, qué si lo vamos a lograr. Venezuela será libre como debe ser.

Aclárate. Publicado: 25-NOV-2009.

Pepito es estudiante "en desacato" de la Escuela Básica Barinas, en el Municipio Barinas, Estado Barinas.

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